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«Una dama de primera»: en Radio Oriental el Card. Daniel Sturla recordó a María Auxiliadora Delgado

By 03/08/2019No Comments
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María Auxiliadora Delgado en la Misa por los 125 años de la llegada de la Madre Rubatto a Uruguay/ Fuente: Federico Elgue/ ICM

La mañana del pasado miércoles 31 de julio falleció María Auxiliadora Delgado. Por este motivo el Card. Daniel Sturla, en el programa “El aporte de la Iglesia de Montevideo”, de Radio Oriental, hizo una semblanza en las que destacó la humildad y la actitud de servicio de la esposa del presidente de la República.

Para el Arzobispo de Montevideo fue “conmovedor ver como en todos lados uno se iba encontrando con distintas personas y existía un dolor compartido por todos los uruguayos”, ante la muerte de María Auxiliadora Delgado. Explicó que “esto por un lado nos habla de una realidad triste por la muerte de una persona querida”, pero “también nos habla muy bien de la calidad de esta misma persona”. Aseguró que si bien en Uruguay no existe el título de primera dama, le esposa del Presidente “fue una dama de primera”.

La familia como prioridad
Después, el Arzobispo de Montevideo hizo un breve repaso de la vida de María Auxiliadora Delgado. “Fue alumna del Colegio San José de la Providencia de las Hermanas Capuchinas de Belvedere y después en un colegio salesiano”, detalló. Además enfatizó que “su propio nombre (María Auxiliadora) la unió de una manera especial a la familia salesiana”. Es así que se conocieron con el actual presidente de la República en una quermés en el Colegio La Divina Providencia, cuando el tenía 16 y ella 19 años. Unos años después se casarían en la Iglesia de los Vascos.

Otro aspecto que destacó el Card. Daniel Sturla fue el entorno familiar de la Sra. Delgado. Junto al Dr. Tabaré Vázquez tuvieron cuatro hijos: Álvaro, Ignacio, Javier y Fabián, a quien adoptaron. Subrayó que más allá de su trabajo, “María Auxiliadora fue con orgullo ama de casa, esposa, madre y abuela”.

Un servicio humilde y callado
Para el Arzobispo de Montevideo uno de sus elementos claves de la vida de María Auxiliadora de Vázquez fue su testimonio de servicio. “Ella ha dicho que su vocación es servir. Pero este servicio lo vivió de un modo humilde, callado. Estando para ayudar a los demás, desde siempre, también siendo esposa del presidente de la República. Siempre estaba para servir a los más humildes y necesitados”, dijo.

Sobre esto agregó que “en la primera presidencia de Dr. Tabaré Vázquez inició y se dedicó a una campaña de cuidado de la salud bucal en todo el país (que la tuvo como coordinadora en este segundo mandato), especialmente los más necesitados, que además de su cometido primario tenía como objetivo la sonrisa, el derecho a sonreír”.

Fe sencilla y firme
El Cardenal  Sturla quiso referirse al lugar que ocupó la fe en la vida de María Auxiliadora Delgado “que vivió y manifestó con sencillez y sin tapujos”. Recordó que la esposa del presidente “iba a Misa a la parroquia de los Carmelitas del Prado, que era su parroquia, y participó en algunas celebraciones en la Catedral, así como en el Congreso Mariano en la Misa de la Aduana de Oribe y en algunos de los Vía Crucis del Cerro de los últimos años, en los que se hacía presente discretamente”.

También, agregó el Arzobispo que “participó de la Fiesta San Felipe y Santiago, y colocó la famosa balconera de Navidad en la casa de la familia Vázquez en el Prado”. “Tenía una unión particular con la familia salesiana, a la que mucho quiso y estuvo en la Isla de Flores donde se colocó una imagen de la Auxiliadora”, añadió.

Unidad de los uruguayos
En opinión del Cardenal Sturla “uno de los hechos destacados en el día de la muerte de María Auxiliadora fue el calor popular y el hecho de ser acompañada por mucha gente. Todo el espectro político se hizo presente para saludar al presidente, dejando de lado toda diferencia y eso es una señal positiva de un Uruguay del que nos podemos enorgullecer”. “Este hecho, agregó, sirvió para manifestar, quizás como uno de sus últimos servicios que María Auxiliadora prestó al Uruguay, esa unidad que los uruguayos sentimos ante el dolor”.

“Que el Señor le conceda el descanso eterno a ella, el consuelo a su familia y que interceda por nuestro querido Uruguay”, concluyó el Arzobispo.