El 30 de noviembre se celebró el acto de renovación del P. Dr. Julio Fernández Techera sj como rector de la Universidad Católica de Uruguay (UCU). Su primer período abarcó desde el 2017 hasta este año, y su renovación significa cuatro años más, hasta el 2024, al frente de la universidad. Además, se inauguró la imagen “Sagrado corazón”, obra del P. Ricardo Ramos.
Comenzó la secretaria general dando la bienvenida formal al rector y al Card. Daniel Sturla, Gran Caciller de la casa de estudios. Después de que el P. Fernández Techera firmó el libro de designaciones en señal de aceptación de la renovación en el cargo. Por su parte, el Arzobispo de Montevideo bendijo una pintura del Sagrado Corazón y, con ella, a la Universidad.
El Card. Sturla expresó que “han sido cuatro años de innovación educativa, de una nueva forma de ver la Universidad Católica, que la pone a tono con las mejores universidades del mundo. Es un nuevo estilo de trabajo, siempre poniendo en el centro a los estudiantes y, como el P. Julio remarcó, continuando con todo el trabajo social que se está haciendo en distintos lugares de Montevideo”. A su vez, el Card. Sturla destacó que “es una gran renovación la que se ha hecho, y hay que consolidarla. Todo esto enmarcado dentro de una universidad católica que busca formar personas íntegras, abiertas a la trascendencia y con la posibilidad de conocer a Jesús”.
A continuación el rector pronunció unas palabras sobre los desafíos y la situación actual de la Universidad. También habló de los objetivos y las orientaciones que la UCU se propone para los próximos cuatro años.
El P. Fernández Techera comentó que “estos cuatro años tienen mucho que ver con afianzar y fortalecer y hacer crecer este modelo mucho más integrado que tenemos hoy de universidad”. Y en relación a este año en particular compartió que se siente profundamente orgulloso: “La universidad respondió espectacular. Realmente, profesores, estudiantes, el personal y todos los servicios respondieron de forma muy creativa, rápida y eficaz. Tuvimos un año, dentro de todo, bastante normal. Se dieron todas las clases, la gente avanzó. Y eso, para mí, es un gran orgullo”.