Con el lema “Familia Patrimonio de humanidad”, eco del VII Encuentro Mundial de las Familias en Milán, se celebró el sábado 6 de octubre en Maturana, con delegaciones de las 10 diócesis del país, el 3er. Congreso Nacional de la Familia y la Vida.
El Congreso estuvo enmarcado en el camino que la Pastoral de la Familia y la Vida va realizando en cada Diócesis, representadas por más de 400 personas entre familias delegadas, sacerdotes y Obispos.
Encuentro , fiesta y esperanza
El inicio de la jornada parecía no ayudar con la fuerte tormenta que se había desatado desde la madrugada, pero como se dice: ”a mal tiempo buena cara”, y así fue… Las delegaciones del interior fueron las primeras en llegar incrementándose la afluencia hacia las 9 de la mañana, hora fijada para el inicio. Reunidos en el teatro, luego de una entusiasta bienvenida, se inició poniendo la jornada en manos del Señor con la oración y el canto: “Bendecid, oh Señor, las familias, amén. Bendecid, oh Señor, la mía también. Los temas de la mañana fueron desarrollados por Mons. Jaime Fuentes (Familia patrimonio dehumanidad) y el Dr. Gianni Gutiérrez y su esposa Andrea Hernández (Educación y Familia).
En el intervalo del mediodía tuvo un relieve muy atractivo y ameno la actuación del trío poprock Bungee integrado por Alvaro Rabaquino en bajo y voz, Federico Rabaquino en batería y Diego Sansonetti en guitarra. Una banda que atrapó a las delegaciones por el sabor a familia, tanto en su vida cotidiana como en el mensaje de sus canciones, según lo explicitaron en la entrevista de presentación.
La presencia de diversas librerías dieron la oportunidad de adquirir abundantes materiales que retomaban aspectos relevantes tanto de los temas de la mañana como de los que se trabajarían en la tarde.
El trabajo en los 10 talleres, elegidos al inscribirse, fue intenso; con sabor a poco según los comentarios al concluir esta instancia. Los temas pedían más: Vocación matrimonial, espiritualidad y compromiso; Ancianidad, nietos y adultos en la familia; Manejo de la crisis en la pareja; Dolor y sufrimiento en la familia; Familia y dimensión bíblica; Aborto y sus secuelas; Prevención y adicciones en la familia; Sexualidad matrimonial; Familia, trabajo y fiesta; Problemática rural, movilidad, emigración y asentamientos.
El Congreso culminó con la concelebración gozosa de haber vivido una jornada que posibilitó sentirse en familia con el corazón lleno de esperanza de poder continuar apostando a que la familia sea la Buena Nueva que, como discípulos misioneros, estamos llamados a proclamar como aporte tan valioso a nuestra sociedad uruguaya.
Crónica publicada por el P.Manuel Pérezsdb, en el Quincenario “Entre Todos”, N° 289.