En la Parroquia Tierra Santa de Montevideo, el pasado martes 28 de noviembre, tuvo lugar la última reunión del año del Oficio Nacional. Estuvieron presentes casi todos los delegados diocesanos de la catequesis.
El texto de San Marcos 6,30-32, fue el elegido para animar el primer momento de la jornada: “Los apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y lo que habían enseñado. Entonces Él les dijo: Vengan conmigo a un lugar solitario, para que descansen un poco. Pues los que iban y venían eran muchos, y nos les quedaba tiempo ni para comer. Y se fueron en la barca, aparte, a un lugar solitario”.
El P. Fabián Silveyra, quien llevó adelante este primer tramo, invitó a tener presente dos ideas: “La Iglesia hace la catequesis” y “La catequesis hace la Iglesia”. A partir de estos conceptos cada diócesis compartió lo vivido durante el año con respecto a la catequesis, a la formación de catequistas y al día Nacional de la Catequesis. Mons. Carlos Collazzi se refirió también su experiencia de la visita Ad Limina.
Seguidamente, tuvo lugar la celebración de la Eucaristía para agradecer a Dios lo vivido a lo largo del año. En este momento, también se tuvo presente de manera especial a los difuntos: Iris Vitello, Teresita Scarelli y Mons. Julio Bonino.
En la tarde llegó el momento de proyectar; desde lo vivido y construir futuro.
Se puso sobre la mesa el importante emprendimiento Diplomado de Catequesis que se desarrollará en Montevideo en el mes de febrero. En esta ocasión participarán cinco catequistas de cada diócesis y contarán con dos expertos del CELAM que guiarán el estudio.
También se dedicó un tiempo para pensar el Día Nacional de la Catequesis que tendrá lugar el 19 de agosto de 2018 bajo el lema “Gusten y vean qué bueno es el Señor” (tomado del salmo responsorial del día) y tendrá como tema el Primer Anuncio. Varios delegados de las diócesis se comprometieron a elaborar materiales y el P. Ricardo Ramos será nuevamente quien dibuje el afiche.
La reunión se evaluó como muy positiva, donde reinó un clima fraterno. Finalmente todos regresaron a sus diócesis con mucho ánimo de seguir trabajando.
