Skip to main content
Noticeu

Mons. Wolcan dirigió su primera carta a las comunidades de Tacuarembó y Rivera: «Abro mis brazos para abrazarlos a todos»

By 22/06/2018No Comments

WhatsApp Image 2018-06-18 at 23.09.03

En su primera comunicación para con quienes habitan la Diícesis de Tacuarembó que el Papa le ha confiado para que sea su Pastor, Mons. Pedro Wolcan, expresó su deseo de conocerlos  y de ser enseñado por ellos “en sus costumbres, en sus hábitos de vida”. Asimismo, manifestó el deseo de integrarse a ellos para continuar la obra evangelizadora recibida “de los mayores, y abrazamos con entusiasmo, con entrega y alegría”.

En su mensaje, el obispo electo de la Diócesis de Tacuarembó, recuerda con gratitud a cuantos lo han precedido “en el servicio al anuncio del Evangelio y al altar en esa región. Particularmente a Mons. Julio Bonino”.

Seguidamente, dirige especiales palabras al clero de la Diócesis,a  las comunidades religiosas y a  los laicos. ,

Al clero Sacerdotes y Diáconos les manifiesta su «cercanía y fraternidad Sacerdotal»  y » la certeza de estar junto a Uds. en la misión a la que `el Señor’ nos ha invitado».

A las comunidades de religiosos y religiosas presentes en Tacuarembó y Rivera  les explicita su particular estima por la vida religiosa. «En ella recibí el primer anuncio, posiblemente la siembra de lo que soy», subraya..

A las hermanas y hermanos laicos de todas las edades, que «hacen la vida de familia, de trabajo, de compromiso laical en la Iglesia y en la sociedad»,  les expresa que es impensable la misión que se le ha confiado sin su participación.

“Sencillamente y conocedor de límites y fragilidades y con las marcas de la vida, les pido la oración por el Ministerio que deberé desarrollar entre Uds., por mi persona, que con nervios y preocupación y confiando en quien me envía, espera el momento de la llegada”, concluye su misiva Mons. Wolcan.


CARTA A LA DIÓCESIS DE TACUAREMBÓ – RIVERA

DE SU NUEVO OBISPO PEDRO WOLCAN OLANO

Carmelo, 19 de junio de 2018

“Para que sea Él el primero en todo” Col 1,18

Al Pueblo de Dios que Peregrina en la Diócesis de Tacuarembó

A cuantos viven y trabajan en los departamentos de Tacuarembó y Rivera

Muy estimados todos:

Desde este rincón de nuestra Patria llego a Uds. con un saludo afectuoso, de profunda estima para todos a quienes estoy llamado a Servir como Pastor. Quiero y deseo conocerlos, saber quiénes son, cómo son. Quiero ser enseñado por Uds. en sus costumbres, en sus hábitos de vida, por la fuerza espiritual de Pueblo que nos llega desde allí hasta aquí por distintos medios de comunicación.

El Santo Padre Francisco me ha designado Obispo de esa Diócesis de Tacuarembó de la cual Uds. son parte y constructores junto a Jesús Buen Pastor, en Su Nombre, con Su Palabra y presencia Resucitada quiero integrarme a Uds. para continuar la obra evangelizadora que recibimos de los mayores, y abrazamos con entusiasmo, con entrega y alegría.

Permítanme una adelantada palabra de reconocimiento y gratitud para cuantos nos han precedido en el servicio al anuncio del Evangelio y al altar en esa región. Particularmente a Mons. Julio Bonino.

Reciba el Clero de la Diócesis, Sacerdotes y Diáconos mi cercanía y fraternidad Sacerdotal y la certeza de estar junto a Uds. en la misión a la que “el Señor” nos ha invitado.

A las Comunidades de Religiosos, y religiosas que animados por “el Señor” y según el carisma propio congregacional han hecho de aquel lugar su Casa y su Pueblo, les expreso y reciban mi particular estima por la vida religiosa, en ella recibí el primer anuncio, posiblemente la siembra de lo que soy.

A las hermanas y hermanos laicos de todas las edades, que hacen la vida de familia, de trabajo, de compromiso laical en la Iglesia y en la sociedad, impensable la misión sin la participación de Uds., imposible la “Misión” que se me ha encomendado sin Uds.

Sencillamente y conocedor de límites y fragilidades y con las marcas de la vida, les pido la oración por el Ministerio que deberé desarrollar entre Uds., por mi persona, que con nervios y preocupación y confiando en quien me envía, espera el momento de la llegada.

Abro mis brazos para abrazarlos a todos, a cada uno implorando los dones de la Paz y Unidad en la Iglesia.

Mons. Pedro Wolcan Olano
Obispo Electo de Tacuarembó