El Obispo de Florida, Mons. Martín Pérez Scremini, presidió el domingo 18 la Eucaristía en la Catedral por la Catequesis de la Diócesis. Con la presencia de varias catequistas de la Catedral. Mons. Pérez Scremini oró por la misión que tienen de transmitir la fe.
El Obispo señaló que la catequesis no consiste sólo en transmitir la fe y una serie de conocimientos, ni solamente un espacio para aprender muchas cosas sino que “es el inicio de un camino que se prolonga por toda la vida que consiste es ir cada día conociendo más y más a Jesucristo. Es un camino, un proceso”.
El Obispo enfatizó que “la tarea de las catequistas es lograr que durante los años que el niño va a catequesis se encuentre con Jesucristo. Se logra sobre todo con el testimonio, con la vida, haciendo creíble el Evangelio. El catequista debe ser el reflejo de Jesús para los niños”. En este sentido, indicó que “es necesario buscar caminos para que esto se logre. Lo que se siembra en el corazón dará sus frutos, no sabemos cuándo, pero dará frutos”.
¿Qué Jesús transmitimos?
El Obispo de Florida dijo que es necesario no presentar, en la catequesis, un Jesús parcializado. “A veces sólo nos quedamos con el Jesús paciente, pero nos olvidamos del Jesús que hoy vemos en el Evangelio y que dijo ‘He venido a traer fuego’. El nos quiere apasionados”, precisó. “En la vida del cristiano, aquel que lo elige, va a tener conflictos y si no tiene conflicto tiene que preguntarse si está viviendo bien la fe. La fe toca la realidad que vivo y por lo tanto genera crisis. No se debe presentar un Jesús parcializado. Hay que presentar el paciente, pero también el exigente como lo vemos hoy”, subrayó..
Al final de la homilía Mons. Pérez Scremini acompañó a un grupo de niños a presentar ante el altar de la Virgen de los Treinta y Tres una ofrenda floral.
Fuente: http://santuariovirgentreintaytres.com/