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La Laicidad a la “uruguaya” en coloquio con el Cardenal, autoridades del CODICEN y docentes

By 11/03/2016marzo 18th, 2016No Comments

foto coloquio

La laicidad en Uruguay y la presentación del libro ¨La ignorancia de la ley no sirve de excusa. Derecho y Ciencia Política” , elaborado por nueve exalumnos salesianos, fueron el eje del Coloquio “¿Tan ilustrados como laicos? Miradas, lecturas y debates en el siglo XXI”, que tuvo lugar el martes 9 de marzo, en el Instituto Salesiano de Formación (ISF).

Los participantes coincidieron en que el propio coloquio era expresión de una auténtica laicidad al dar lugar al intercambio de diversas miradas y al sano debate, que no faltó.

La mesa del Coloquio estuvo integrada por el Arzobispo de Montevideo, Cardenal Daniel Sturla, el Presidente del CODICEN, Prof. Wilson Netto, el Consejero del CODICEN, Dr. Robert Silva, la Prof. Rosa Carrido (Docente del IPA) y la Prof. Virginia Coitinhio de la Asociación de Profesores de Educación Social y Cívica y de Sociología de Derecho.

El libro presentado forma parte de la bibliografía recomendada por Educación Secundaria para 6to año de Bachillerato de Derecho y es fruto del trabajo colectivo de nueve exalumnos del Instituto Juan XXIII que compartieron, tiempo atrás, clases de Educación Ciudadana y Derecho, coordinados por el Dr. Juan Pablo Pío Guarniero: Pilar Beceiro, Marcos Cabot, Joaquín Castro, Mateo Noseda, Guillermo Rodríguez Pereira, Florencia Salgueiro, Fernanda Sfeir y Rodrigo Surraco.

VIVA LA DIFERENCIA

El Cardenal Sturla destacó que Uruguay y la Iglesia evolucionaron sobre el tema de la laicidad, que supone pluralidad y que el hecho religioso (que es un hecho social además de personal) pueda tener su manifestación pública “como una realidad natural” y no “como una realidad artificial que nos planteamos si puede ser o no”.

El Cardenal aclaró que respeto no es igual a “tolerancia”, que no se trata de “aguantar” que el otro piense distinto y subrayó la necesidad de que “los que pensamos distinto podamos expresarlo en el marco de la democracia y del respeto al otro”. “Bienvenidas todas las tradiciones”, dijo con énfasis el Arzobispo de Montevideo.

Por su parte, el Consejero del CODICEN destacó que la ley de educación ubica a la laicidad dentro de los principios básicos de la educación pública estatal, aunque opinó que tiene una omisión a subsanar, que es “la prohibición expresa de la realización de proselitismo, de cualquier naturaleza”. No obstante, expuso la importancia de la existencia de posiciones diferentes y que, “a partir del disenso, se pueda construir una nueva realidad que nos una y no nos divida”.

Al referirse al tema de la laicidad, el Presidente del CODICEN resaltó la importancia de percibir la diversidad “no como un problema, sino como una riqueza y un  desafío”. “A veces uno se encuentra con construcciones demasiado uniformes que armamos dentro de nuestras propias sociedades, estereotipos, visiones, concepciones, que nos van cerrando en sí mismos y van impidiendo la perspectiva de penetrar en otros mundos, de ser abiertos, de escuchar otras ideas y de tener la capacidad, en libertad, de poder interactuar con ellas”, enfatizó.

El Dr. Pío, en su intervención, abogó por que se entienda “el punto de vista del otro como algo positivo y el derecho a no ser iguales sino diferentes, en un sociedad donde el proyecto individual de cada uno cabe en el proyecto colectivo”.

En esta misma línea, la representante de la Asociación de Profesores de Educación Social y Cívica y de Sociología de Derecho opinó que “la promoción de una real ciudadanía activa implica el debate acerca de las diferencias, ya no el derecho a ser iguales, sino el derecho a ser diferentes”.

“La democracia de hoy nos demanda nuevas formas de integración política y los estados enfrentan nuevos desafíos”, sostuvo la Prof. Coitinhio. Recordó que el estado liberal del siglo XIX concibió la religión “como una opción privada de la persona, ajena a la construcción del bien común” y decidió organizar la educación pública “de espalda a la misma”. “Pero la religión sí existe, y si bien es una opción personal, es un hecho social y tiene efectos sociales que pueden resultar, si se los reconoce, sumamente provechosos para el fortalecimiento de proyectos modernos de estado social, que se fundamentan en la solidaridad como base de la construcción comunitaria”, acotó.

LA LAICIDAD EN LA LEY DE  EDUCACION ¿UNA INCOHERENCIA? 

Mientras el Consejero Silva remarcó dos “cuestiones” que están en la ley de educación: la libertad de enseñanza y la libertad de cátedra, la Prof. Carrido puso sobre la mesa la incoherencia que se desprende de la existencia de una ley que en la teoría contempla la laicidad , pero el impedimento práctico de ejercer la libertad de cátedra al obligar al docente a ceñirse al programa, “lo que viola la laicidad, al no contemplar la diversidad de posturas”.

El Consejero Silva respondió que quien tenga la “mínima sospecha o indicio de que no se respeta la laicidad que lo ponga sobre la mesa, porque como autoridades educativas estamos obligados a tomar las medidas que sean necesarias porque no se estaría cumpliendo con uno de los principios fundamentales de la educación estatal”.

La Profesora Carrido destacó que “es nuestra  obligación como educadores democráticos y respetuosos de la laicidad facilitar el acceso a todas las fuentes bibibliográficas, respetar la pluralidad de posturas cuando enseñamos un tema, hacerlas explícitas, promover estas instancias siendo propositivos y continuar peleando firmemente cuando nuestras propuestas son prohibidas, censuradas o utilizadas para instigar miedo en aquellos colegas que valientemente las utilizan”. “En un sistema educativo que se dice democrático no se puede callar la voz de ningún docente, menos la de aquellos que defienden la democracia en la teoría y en la práctica”, subrayó la docente.

FRUTOS DE LA LIBERTAD RESPONSABLE DEL JUAN XXIII

Refiriéndose al libro confeccionado por los exalumnos del Instituto Juan XXIII, el Consejero Silva dijo que “la presentación de un libro siempre es un momento de alegría”. Manifestó que se trata de un libro de actualidad, a recomendar, profesional, que abunda en autores y citas bibliográficas. Anunció que el texto se usará no solamente en Bachillerato de Derecho sino, además, en la educación media técnica y en Bachillerato Tecnológico.

Netto, por su parte, felicitó a los autores y celebró la existencia de grupos de jóvenes y docentes que “quieren transformar su realidad y están dispuestos a hacer algo al respecto, no solamente a contemplarla”.

El coordinador de la publicación compartió que la elección del equipo que elaboró la publicación fue un ejercicio de auténtica laicidad ya que son muy diferentes, pero los unió la idoneidad para “encarar algo colectivo, bien plural y con un objetivo común”.

El abogado y docente subrayó el respaldo de la dirección y la comunidad educativa del Instituto Juan XXIII para la realización del libro. “Tenemos una marca que nos hace poder trabajar con personas que pensamos bien distintos”, precisó. Esta apreciación fue compartida durante su intervención por el Cardenal Sturla quien, evocando su época de estudiante en esa institución, afirmó que “el Instituto Juan XXIII es ejemplo de un lugar donde un elemento esencial de la educación es la libertad responsable, que está en la mentalidad de alumnos y profesores”.

El Dr. Pío manifestó que “el rol del docente es fundamental” en la enseñanza de la materia,  “porque el material no habla por sí solo”. El docente indicó que en la educación está faltando “trabajar la sensibilidad del estudiante” y remarcó la necesidad de trabajar con los estudiantes “en territorio”, es decir, instrumentar una extensión universitaria pero en secundaria, para “rescatar la buena política, el contacto cara a cara con la gente y la razón de ser de todos nosotros”.