El Señor no quiere que pensemos continuamente en nuestras caídas, sino que lo miremos a Él, que en nuestras caídas ve a hijos a los que levantar y en nuestras miserias ve a hijos a los que amar con misericordia.
Fue rugbista y compitió en las juveniles con la selección. Sintió el llamado de Dios y ahora es diácono y ya lleva escritos cuatro libros. Hablamos de su experiencia de vida, la Pascua y la Semana Santa.