LECTIO DIVINA – 2º PROPUESTA
El conflicto de Antioquía
La Evangelización entre los gentiles
“ACOGER AL DIFERENTE”
Ambientación: La Biblia y alrededor algunos recortes de diarios con diferentes situaciones: sociales, policiales, políticas y religiosas.
Oración de apertura: Invocar al Espíritu Santo pidiendo la luz para saber tender puentes entre los hermanos y no ser causa de división. Canto: “Todos unidos formando un solo cuerpo”.
Motivación inicial
Se puede compartir algunas experiencias en donde la fe haya sido para nosotros motivos de conflicto en la familia o con los conocidos. Muchas veces puede ser porque otros no comparten nuestra fe, otras veces porque les juzgamos por su lejanía e indiferencia religiosa. También puede ser porque la gente espera de nosotros coherencia entre la fe que celebramos y la vida cotidiana.
Texto bíblico: Hch 15, 1-35
Reflexionamos juntos:
¿No tiene también la Iglesia que pasar constantemente por la experiencia de la gran dificultad que supone armonizar una tradición practicada durante largo tiempo con las exigencias y necesidades de una actualidad cambiante?
Los pregoneros del Evangelio están en camino. Todos ellos se sabían unidos en la misma fe. En la misma solicitud e interés por el camino de la Iglesia. Los relatos de misión de Pablo y Bernabé les dieron conciencia de su solidaridad, con voluntad de ser todos corresponsables. El contacto misionero y la información estimulante en el ámbito eclesial reaniman la fe y despiertan la solicitud por la comunión.
¿Sabemos reconocer la obra buena que Dios va realizando en los demás?
¿Somos atentos para poner al servicio de la evangelización nuestros talentos?
¿Nuestras exigencias morales son motivadas por el Espíritu Santo o por nuestros caprichos? ¿Nuestra fe y obras están en armonía?
¿Qué es lo que dice Pedro y Santiago? ¿En dónde está el acento de su intervención?
Esta Iglesia no vive de una tónica entusiástica, sino que es una comunidad jurídicamente ordenada, que se sirve de medios y organizaciones, como sucede en la sociedad humana en general. Desde luego, esto no debe quitar a la Iglesia nada de su esencia, que sugiere un plano superior.
Este «decreto apostólico» -como se lo suele llamar- vino a ser el arquetipo de todos los decretos y declaraciones oficiales de la Iglesia.
Entonces: ¿En dónde radica el fundamento de las decisiones que toman en la asamblea? ¿Qué papel juega el Espíritu Santo? ¿Cómo recibe la comunidad de Antioquía las decisiones de la Iglesia Madre?
Sugerencia para el compromiso: Ante las dificultades que suceden en mi comunidad procurar siempre un espíritu de escucha, de diálogo y perdón. Ante todo, cuidar la comunión como un don del Espíritu Santo y antes de decir o hacer algo pedirle al Espíritu su luz.
Oración final: Orar con el Padre Nuestro pidiendo la unidad en toda la Iglesia y con todos los cristianos del mundo. Señor, que todos sean uno para que el mundo crea…
Aporte al animador:
La visita de los judeo-cristianos partidarios de la circuncisión de los gentiles a Antioquía (Hechos 15,1) no careció de consecuencias. Pablo cuenta un episodio de diferencia con Pedro en Gálatas 2,11-14. Al parecer, Pedro había visitado Antioquía con anterioridad y había compartido con los miembros de la comunidad de esta ciudad su punto de vista favorable a no imponer el yugo de la ley a los gentiles. La información proporcionada por Pablo encaja, de hecho, con los datos que la fuente lucana recoge en el episodio descrito en Hch 10 y 11 relativo a Cornelio, así como con lo referido a Simón, el curtidor de Jope (Hch 10, 28), y pone de manifiesto que, sustancialmente, Pablo y Pedro tenían el mismo punto de vista en relación con el tema.
Esta situación cambió cuando se produjo la llegada de algunos judeo-cristianos palestinos cercanos a Santiago (Gál 2,12) que sostenían la necesidad de que los gentiles se circuncidaran aceptando el judaísmo si deseaban formar parte de las comunidades de discípulos. Atemorizado, Pedro optó por desviarse de su línea inicial de conducta inicial, lo que provocó -bastante lógicamente dado su peso en el movimiento– una postura similar en los demás judeo-cristianos de Antioquia. Incluso alguien tan comprometido con la misión entre los gentiles como Bernabé (Gál 2,13) acabó incurriendo en una conducta similar.
El enfrentamiento de Pablo con Pedro se produjo ante toda la iglesia de Antioquia y quedó definido en unos términos enormemente claros. La salvación no era algo que se ganaba por las obras. No era algo que pudiera comprarse, adquirirse, merecerse por las obras. No, se trataba de un regalo de Dios y ese regalo de Dios sólo podía ser recibido mediante la fe, una fe en que Jesús era el mesías y había muerto expiatoriamente en la cruz para la salvación del género humano.
Lectio completa para descargar:El conflicto en Antioquia Hch 15, 1-35